lunes, 15 de noviembre de 2010

DISCURSO OFICIAL DEL VI ANIVERSARIO DE LOS BOMBEROS MUNICIPALES DE ANTIGUA

El Vice Ministro de Educación, Jorge Velásquez, acompañado del Comandante Ejecutivo, Mayor Pedro Samayoa y el Mayor Iván Véliz, durante el bautizo tradicional de la IV promoción de Bomberos Municipales.

Oficial Mayor y Lic. Rony Iván Véliz (Director de Comunicación Social)

Ser bombero, viajar en una motobomba o un carro de rescate, escuchar el ulular de una sirena, tomar una manguera para apagar un incendio, es el sueño que muchos experimentamos cuando fuimos niños.

Para llegar a ser una realidad ese sueño se necesita tener atributos que no se pueden adquirir con todo el oro del mundo, mucho menos compradazgos.  Vocación de servicio, valor, abnegación, disciplina, amor al prójimo y en casos extremos, la decisión de ofrendar la propia vida para salvar la de otra persona.

Si usted tiene esos atributos, nació para enfrentarse al constante peligro al que se está expuesto diariamente ese hombre o mujer que hoy se observa sujetado a una maquina contra incendio, cuyo destino le lleva a brindar ayuda y consuelo para quien llora o sufre la pérdida de un ser querido.

El 3 de noviembre la estación de bomberos municipales de La Antigua Guatemala, cumplió seis años de vida. Una de las instituciones más apreciadas por los guatemaltecos, que sin distinción de edad, género, clase social o económica, se han beneficiado de su esfuerzo cotidiano.

La tarea de los bomberos abarca mucho más que el control de incendios, tarea a la cual continúan dedicando buena parte de sus esfuerzos.

El Viceministro de Educación, Jorge Velásquez y el  director de la Academia Técnica de Bomberos Municipales de La Antigua Guatemala, Lic. Rodolfo Chacón Romero, entregan los titulos respectivos.

En las ambulancias de ese cuerpo de socorro han sido trasladadas miles de personas que le deben la vida, y que fueron atendidas con esmero por unos servidores sociales que se han ganado un lugar importante en la memoria nacional como sinónimo de samaritanos incondicionales y eficientes.

Esta relación afectiva de los guatemaltecos con los bomberos, lamentablemente no se refleja en un presupuesto decoroso.

Por ello, es lamentable que en demasiados casos se vea a sus elementos a la entrada de las poblaciones pidiendo ayuda económica a los automovilistas para comprar combustible para sus unidades de emergencia, repuestos e incluso parte del salario para los propios rescatistas.

El comandante Pedro Samayoa, entrega un reconocimiento a una dama bombero.

Eso debe dejar de ser necesario. Es interesante señalar que la colaboración es entregada por la gente con la absoluta seguridad de que el dinero será bien empleado y con mucha transparencia.

El equipo con el que trabajan los bomberos debería ser mejor y más moderno. Actualmente, sus instalaciones, en general, carecen de comodidades suficientes para el personal, muchas de sus unidades para apagar incendios ya son muy antiguas, y los vehículos de rescate son, en realidad, ejemplos de artesanía automovilística, al ser de alguna manera improvisados en picops o en paneles.

Pese a esos contratiempos, los rescatistas se las arreglan para prestar un servicio que en otros países requeriría de equipo no sólo adicional sino más moderno.

La IV promoción de Bomberos Municipales de La Antigua y Primera avalada por el MINEDUC.
Los bomberos reciben el casco rojo de manos de los Oficiales Mayores, Pedro Samayoa y Rony Véliz.

Los Bomberos Municipales de la Antigua Guatemala, se han ganado el respeto de la población al ver su capacidad de liderazgo y profesionalismo durante estos seis años de vida al servicio de su pueblo.

Estos hombres y mujeres que han sufrido los embates de la vida, se han levantado poco a poco y han demostrado una vez más que son la estación líder en el departamento de Sacatepéquez.

A pesar de las dificultades que han afrontado, nunca han paralizado el servicio a su comunidad y han mantenido siempre su frente en alto, como verdaderos profesionales.

Han sufrido boicot, aislamiento, amenazas, politización, desalojo de sus instalaciones en varias oportunidades, injurias y calumnias a lo largo de su historia; pero nunca se han doblegado. Al contrario han sacado fuerzas para demostrarle a sus detractores que más vale estar solos que mal acompañados.

Los rescatistas recibieron su titulo como bomberos profesionales de 3a. clase.

Los bomberos han tenido la necesidad de convertirse en albañiles, fontaneros, electricistas y soldadores para levantar las paredes de nuestra nueva casa. Esta casa aunque pequeña y humilde fue levantada con las manos de estos hombres por falta de dinero.

Han logrado salieron adelante y ahora están demostrando el alto grado de profesionalismo que tienen por el amor a su comunidad. Más de 12 mil servicios de emergencia han sido atendidos a lo largo de estos 6 años por los bomberos del casco rojo.

Al cumplirse los primeros 6 años de vida. El Directorio del CBMA presentan un cariñoso y fraternal saludo a los valientes hombres y mujeres que a través de estos años han demostrado que aun sigue vivo la trilogía del Cuerpo de Bomberos Municipales de La Antigua Guatemala, Disciplina, Honor y Profesionalismo.
El Mayor Iván Véliz a cargo del discurso oficial del CBMA


Este saludo lo hacemos, no cabe duda, a nombre de los millones de personas que en estos seis años de existencia han sido testigos de la eficiencia del trabajo que efectúan los bomberos municipales y del cual todos, sin excepción, podemos vernos algún día beneficiados.