domingo, 27 de febrero de 2011

Amplian alerta amarilla por volcanes de Fuego y Santiaguito

La creciente actividad del volcán de Fuego y Santiaguito en Guatemala obligó a los Bomberos Municipales de La Antigua Guatemala y la estatal Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres  (Conred) a ampliar la cobertura de la alerta amarilla de dos a cinco departamentos en el suroeste del país.

“Debido a la actividad que en los últimos días han presentando los volcanes Santiaguito y Fuego, las autoridades departamentales de Retalhuleu y Quetzaltenango, así como Sacatepéquez, Escuintla y Chimaltenango, se mantienen en alerta amarilla departamental ante cualquier incremento en la actividad de ambos colosos”, afirmó la entidad en un comunicado.

La Conred había decretado la alerta en los departamentos de Quetzaltenango  (oeste) y Retalhuleu  (sur) por el volcán Santiaguito, pero amplió a las otras tres regiones por el volcán Fuego.
Los Bomberos Municipales de La Antigua Guatemala, se mantienen alertas ante el incremento de la actividad del Volcán de Fuego. Tambien todo el personal se encuentra atento al llamado de las autoriades de la Conred, especialmente su patrulla de rescate al mando del comandante Pedro Samayoa.

Afirma que esos dos volcanes, así como el Pacaya, que en mayo registró una potente erupción que dejó un muerto, miles de damnificados y pérdidas por unos 500 millones de dólares, se mantienen activos y lanzan un flujo piroclástico y fumarolas de ceniza.

Sin embargo, el Santiaguito es el más activo, pues se forman columnas de ceniza de casi 900 metros de altura, las cuales están “acompañadas de sonido moderado de desgasificación, además se generaron avalanchas débiles que tienen corto recorrido”.
 

“De acuerdo con lo observado en el volcán de Fuego, se han generado explosiones débiles que forman columnas de ceniza que alcanzan casi 600 metros sobre el cráter”, agrega.

Ante ello, la Conred recomendó a la Dirección de Aeronáutica Civil mantener las precauciones con el tráfico aéreo debido a la presencia de ceniza en los alrededores de los volcanes Santiaguito y Fuego.

En Guatemala existen unos 288 volcanes, de los cuales ocho han reportado actividad en la historia.

La erupción más grande del Santiaguito ocurrió en 1929 cuando mató a unas 2 mil 500 personas.

viernes, 25 de febrero de 2011

Bombero por un día

Por Fred Durso/NFPA

Yo pensaba que era imposible aumentar 50 libras en 20 minutos. Pero eso es lo que sucedió a principios del otoño, cuando me calcé el traje de bombero—y todo el equipamiento que viene con él.

Mi ingreso al combate de incendios vino de la mano de Fire Ops 101 (Operaciones de Incendio 101), un programa de pruebas en la Academia para el Combate de Incendios del Departamento de Bomberos de Massachusetts.

El programa de un día de duración, llevado a cabo a fines de octubre, prometía mostrar a miembros del personal de la NFPA, incluyéndome, operaciones de incendio y rescate participando de simulacros reales.

Organizado por Ken Willette, Gerente de la División de Protección Pública contra Incendios de la NFPA, el evento fue diseñado para demostrar cómo las normas NFPA impactan en los bomberos.

“Los participantes experimentarán en carne propia cómo nuestras normas se traducen de criterios escritos a productos utilizados por los bomberos en forma diaria en todo el mundo,” dijo Willette.

“Ese es el impacto que la NFPA y sus empleados tienen en todas las divisiones y departamentos —dar apoyo al desarrollo de normas para hacer que las vidas de todos, incluidas las vidas de los bomberos, cuenten con mayor seguridad”.


Entrevisté una gran cantidad de oficiales del cuerpo de bomberos, tanto en la NFPA y como periodista en Filadelfia, pero nunca comprendí del todo la resistencia física que los bomberos deben tener y los obstáculos que enfrentan en su trabajo. ¿Qué mejor forma de experimentar esos desafíos que en carne propia, convirtiéndome en bombero por un día?.

Definitivamente sentí las piezas del equipamiento a medida que me calzaba el equipo para el combate de incendios, pero toda esa protección también me hizo sentir cada vez más inmóvil: pesadas botas negras; depósito metálico de aire amarrado a mi espalda; gruesos guantes; una mascara que cubría mis ojos, nariz, boca y oídos; casco; amplios pantalones contra incendios con tirantes rojos; una chaqueta contra incendios marrón con refractarios amarillos cubriendo mi sudado atuendo de civil.

El sólo hecho de vestirme era un trabajo en sí mismo. Cuando finalmente aseguré el aparato de respiración a mi máscara, empañada de tanto jadear, sonaba como el psicópata Michael Myers respirando a través de su máscara en la saga de terror “Halloween”.

Estaba ansioso y entusiasmado en mi nuevo uniforme, pero no tuve mucho tiempo para aclimatarme.

Antes de que pudiéramos familiarizarnos con todo nuestro equipo, a 26 colegas de la NFPA y a mí nos informaron sobre cómo serían las actividades del día y nos dieron información sobre las instalaciones, las cuales irónicamente sufrieron un devastador incendio en 1982.


Ahora en la última parte de una remodelación de $42 millones, el Departamento de Bomberos de Massachusetts, del cual forma parte la academia, incluye oficinas administrativas, salones de clase, una estación de bomberos de cinco plataformas, edificios para simulacros, y una escuela para entrenamientos de incendio producidos por gas.

El Inspector de Bomberos Estatales Stephen Coan, que estaba presente, nos llamaba a mí y a mis camaradas de la NFPA “conejillos de indias”, dado que Fire Ops 101 era una prueba tanto para la NFPA como para el Departamento de Bomberos del estado. Asistiríamos a un curso intensivo de un día de duración, de un programa de entrenamiento para bomberos de 12 semanas. Coan espera reproducir un programa en Maryland que permita a los legisladores del estado calzarse el traje por un día con el fin de acercarles una mejor comprensión de los rigores del combate de incendios.

“Rigores” por llamarlo de alguna manera sutil. Durante nuestra familiarización con los aparatos de respiración autónomos (SCBA, por sus siglas en inglés), aprendí sobre las limitaciones del equipamiento, incluido su limitado suministro de aire y el efecto que tiene en nuestra capacidad para movernos y comunicarnos.

“Siempre digo que el combate de incendios es un deporte de contacto”, dijo Sean White, el coordinador asistente de la academia para el entrenamiento de reclutas. “Para que puedan comunicarse con alguien, deberán atraerlo hacia ustedes. Es muy difícil hablar mientras se usa este equipo”.

White estaba en lo cierto. El grupo de la NFPA fue dividido en cuatro cuadrillas, y mi primer ejercicio fue el de completar una búsqueda en un simulacro de búsqueda y rescate dentro de un edificio gris desprovisto de luz.

Con mi aparato de respiración, tuve que inhalar profundamente para llevar el suficiente aire a mis pulmones. Intenté hablar con mi compañero, el ingeniero electrónico Mark Cloutier de NFPA, pero mi máscara apagaba mi voz.


El entrenador me alcanzó una barra de Halligan, una herramienta para bomberos utilizada para fines múltiples, parecida a una palanca, y le dio a Cloutier un hacha.

En cuatro patas, guié el trayecto hacia el edificio con Mark detrás de mí, aferrado a la pierna de mi pantalón.

Coloqué la barra de Halligan en el suelo y la moví en la oscuridad frente a mí, chequeando que no hubiera víctimas u obstrucciones mientras mi mano derecha tanteaba el muro, una táctica utilizada por los bomberos para hacerse un mapa mental del área mientras ubican las posibles salidas.

Mark hizo lo mismo con el mango del hacha, pero la movía hacia su izquierda. Sentí una escalera que eventualmente subí—en cuatro patas—en la oscuridad. Incapaz de ver, mi pulso y mi respiración se intensificaron. En el segundo piso, Mark jaló de mis pantalones. Había descubierto una “víctima”—una pila de viejas mangueras de incendio en forma de persona. Misión cumplida. Nos quitamos las máscaras y respiramos aliviados.

Antes de que pudiéramos recobrar el aliento, mi grupo fue enviado a otro edificio, donde nuestro próximo desafío era el manejo de las mangueras de incendio abriéndolas y cerrándolas.

En grupos de tres, nos turnamos para sostener las mangueras cargadas de uno y tres cuartos de pulgada —con una presión de 100 libras por pulgada cuadrada— y pulverizar el agua frente a nosotros. Sujetar firmemente a esta bestia, especialmente al momento de dispararse el agua, al principio fue como intentar controlar a una movediza boa constrictor.


Cuando llegó el momento en que yo debía tomar la delantera, y abrir el agua, temía golpear a alguno de los oficiales de bomberos que se encontraban parados peligrosamente cerca del chorro; lo ultimo que quería hacer era empaparlos en su propio terreno. Afirmé la manguera lo mejor que pude, abrí la boquilla, y me las arreglé para mantenerla lejos de nuestros anfitriones. Otra tarea completada con éxito.

En el aire en el piso

Casi de inmediato, nuestro instructor nos dio nuestra próxima misión: subir la pesada manguera tres pisos por escalera en otro edificio débilmente iluminado, sacar el cabezal de la manguera por una ventana del tercer piso, y abrir el agua. Pensé para mí, ¿Otra vez?

No tuvimos demasiado tiempo para procesar esta nueva orden. Algunos de mis compañeros de equipo tomaron la punta de la manguera y corrieron escaleras arriba, mientras otros comenzaron a serpentearla dentro del edificio.

Yo era el último de la fila, lo que significaba que debía traer continuamente partes de la pesada manguera hacia el interior del edificio, donde comenzaba a serpentear escaleras arriba.

El sudor me empapaba el rostro a medida que mi instructor me gritaba para que continuara trayendo la manguera hacia el interior del edificio.

Ya me habían advertido sobre ubicarme entre la manguera y el muro de la escalera, dado que podía quedar atrapado si tiraban de la manguera repentinamente desde arriba, pero la intensidad de la situación eventualmente sacó lo mejor de mí.

A medida que trepaba los escalones hacia el tercer piso, me encontré exactamente en la situación que mi instructor me había advertido que evitara. La manguera de repente se sacudió, golpeándome contra el muro; por un momento estuve atrapado, y debí luchar con la manguera para poder escapar. Cuando finalmente llegué al tercer piso, encontré al resto de mi equipo fatigado y acalorado.

Pero habían logrado subir la manguera por la escalera, asomar la lanza por la ventana y abrir el agua—otra misión cumplida. Corría el sudor por mi rostro, y moría por un poco de aire fresco. Peleando contra la claustrofobia, me desconecté la mascara, respiré sofocadamente, y agradecí por la brisa fresca.

Nuestra próxima lección se centró en la importancia de los sistemas de montantes. Un piso más abajo había una manguera conectada a un tubo montante. Nuestro objetivo consistía en llevar la manguera cargada del segundo al tercer piso, y nuevamente, descargarla por la ventana. Esta vez, nadie quedó sin aliento—y la lección sobre la utilidad de los montantes no se nos perdió.


Tomándonos un descanso de algunas de las más extenuantes actividades del día, nos dieron una clase sobre el camión de escalera, incluida la cesta lateral, los estabilizadores que mantienen firme al camión y evitan que se incline cuando se está utilizando la cesta, y más.

 Al intentar acercar la cesta a un área o edificio específico, aprendí que como conductor quien controla la máquina no se supone que deba ascender la cesta directamente al área, sino más bien ascenderla antes de descender la cesta en forma diagonal al área objetivo—así hay menos posibilidades de que golpee contra el edificio.

La lección concluyó con un paseo en la cesta del camión; además de nuestro instructor, que controlaba la cesta, tres participantes de la NFPA por vez, se amarraban antes de ser elevados hasta el techo de una torre de entrenamiento de seis pisos, donde bajábamos. La vista era bonita, pero yo estaba impaciente por bajar a tierra y apagar algún fuego verdadero.

Mi deseo fue concedido. Nuestro ejercicio trataba sobre el manejo de los extintores para tres tipos de incendios: combustibles comunes en un cubo de basura, un incendio de grasa en lo que fue esencialmente una gran sartén, y un motor eléctrico que se prendió fuego.

Admito que nunca había usado un extintor, pero la sigla que nos dio el instructor PASS (en inglés: P, pull, jalar la clavija; A, aim, apuntar la boquilla hacia la llama; S, squeeze, apretar el gatillo, y S, sweep, o desparramar el agente sobre el fuego). resultó muy práctica durante el ejercicio, y pude extinguir todo el fuego sin ningún tipo de problema.

El último evento del día fue el de observar qué tan rápido puede propagarse e intensificarse un incendio—este era un fuego demasiado grande para ser apagado con un extintor. Todos los participantes de la NFPA, con la vestimenta y equipamiento completo, se reunieron afuera alrededor de un pequeño cuarto independiente de madera, cuyas dimensiones rondaban los seis pies por ocho, con una entrada abierta.

El cuarto contenía unas paletas de madera, una TV, y paja desparramada. Mientras los bomberos le prendían fuego al cuarto, el Gerente de División de la NFPA, Rich Bielen y yo sosteníamos cámaras de imagen térmica a unos 10 pies del fuego y veíamos cómo aumentaban las manchas rojas en nuestros visores. En el pico del incendio, las cámaras registraron la temperatura en la parte superior del cuarto a unos 1.500 grados.

La fuerza del calor aumentó intensamente, y tuve que alejarme. En apenas unos minutos, las llamas parecían incontrolables. Una vez que los bomberos —los profesionales, nosotros no— pulverizaron el cuarto, nos dijeron que observáramos cómo el color del humo cambiaba de negro a gris, indicando que el agua estaba reduciendo las llamas de manera efectiva. Aún cuando los bomberos controlaron el fuego, continuaba saliendo humo de la entrada.

Era increíble cuánto daño había producido el fuego en tan poco tiempo, a pesar de que los muros del cuarto, sorprendentemente, aún parecían intactos. Con el entrenamiento completo, pude finalmente sacarme el uniforme; había estado usándolo por seis horas, y liberarme de él de repente me hizo sentir más liviano.

Más tarde escuché de Willette que los códigos NFPA habían jugado un papel importante en mi protección a lo largo del día. Mi equipo de protección personal, y el resto del equipo que había usado, cumplía con las disposiciones de un conjunto de normas NFPA, incluidas la NFPA 1961, Mangueras de incendio; NFPA 1964, Boquillas rociadoras; NFPA 1971.

Vestimenta de protección para el combate de incendios estructurales y combate de incendios de proximidad; y NFPA 1981, Aparatos respiratorios auto-contenidos de circuito abierto para incendio y servicio de emergencia. La torre aérea que me transportó al techo del edificio de seis pisos fue diseñada mediante el uso de la norma NFPA 1901.

Vehículos automóviles para el combate de incendios. La NFPA está considerando la organización de otro curso para su personal, posiblemente en la primavera, y un programa similar sobre ”las normas en acción” en la NFPA Conference & Expo, programada para el 12 al 15 de junio de 2011, en Boston, donde se hará una demostración de los equipos a los miembros de la NFPA.

Sabía que las actividades del día serían tanto extenuantes como apasionantes, pero mientras manejaba de regreso a mi departamento en Boston no podía creer lo agotado que me sentía. Sólo puedo imaginar cómo debe ser esa tarea cuando están exacerbadas por situaciones reales de incendio y de vida o muerte. Tanto los hombres y mujeres que se dedican a esta actividad —al igual que las organizaciones que apoyan su trabajo como la NFPA— inspiran el mayor de los respetos.

Tomado de la Revista NFPA

martes, 22 de febrero de 2011

LOCALIZAN RESTOS HUMANOS EN SAN CRISTÓBAL EL ALTO

La unidad PR-4 fue enviada al lugar del macabro hallazgo.

Un macrabro hallazgo fue descubierto este día en un sector de la aldea San Cristóbal el Alto, Antigua Guatemala, informaron los Bomberos Municipales de esta localidad.
Después de un rastreo por el área localizaron la pierna izquiera, el tórax y los brazos de una mujer de unos 20 años que fue descuatizada por desconocidos, dijo la directora de los rescatistas, Mayor Stephanie Richman.
Por aparte, el comandante ejecutivo, Mayor Pedro Samayoa, se encuentra al frente de otro grupo de bomberos buscando las partes que hacen falta para completar el cuerpo.

jueves, 17 de febrero de 2011

Continúa alerta amarilla por actividad en Volcán de Fuego

El Volcán de Fuego se encuentra en erupción.

Los Bomberos Municipales de La Antigua Guatemala y la  Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) continúa con  alerta amarilla por los constantes retumbos y erupción del Volcán de Fuego, que se encuentra entre Chimaltenango, Sacatepéquez y Escuintla.

La delegación de la Conred en Sacatepéquez reportó que como consecuencia de las erupciones que empezaron a finales de diciembre del 2010 y aún persisten, se inició la evaluación de las rutas de evacuación y el monitoreo en las comunidades de Santa Sofía, Sangre de Cristo y El Porvenir, de San Juan Alotenango, así como en Morelia y Ceilán, situadas en las faldas del volcán, en San Pedro Yepocapa, Chimaltenango.
Según Cirilo López, de la Conred, los retumbos y el lanzamiento de arena y ceniza se encuentran en el nivel normal; sin embargo, se monitorea en forma constante las comunidades, a fin de evaluar las condiciones de los habitantes para salir en caso de urgencia, y se vigila el comportamiento del coloso.
Los Bomberos Municipales se encuentran atentos ante el incremento de la actividad del Volcán de Agua.

“Junto a los comunitarios, recientemente trabajamos en un plan de respuesta en las comunidades de Santa Lucía Cotzumalguapa, Escuintla; San Pedro Yepocapa, Chimaltenanango; y San Juan Alotenango, Sacatepéquez, para unificar criterios a la hora de una evacuación masiva”, afirmó.
"Estamos listos a la orden de la Conred para organizarnos y apoyar en una eventual evacuación de los pobladores de las áreas afectadas por el Volcán de Fuego", dijo el comandante ejecutivo, Mayor Pedro Samayoa.
Miembros de los consejos comunitarios de Desarrollo y 21 alcaldes auxiliares son los responsables actualmente del monitoreo en las bases de radiocomunicadores, ubicadas en la parte baja del volcán.

miércoles, 16 de febrero de 2011

DISCIPLINA Y ORGANIZACIÓN

El servicio de bomberos tiene una larga e importante historia.  Es una organización rica en herencia, dedicación, sacrificio altruista y acción de inspiración humana acumulado, todo esto, a través de muchos años de servicio.   
Cada Bombero Municipal de La Antigua Guatemala recibe como herencia las tradiciones del pasado y, en parte, las acciones de ellos formarán el futuro del cuerpo de bomberos y del  país. 
La tradición larga y noble de prestar servicio en tiempo de necesidad ha establecido un patrimonio del cuál el bombero puede estar orgulloso.

Como toda entidad de servicio público, los Bomberos Municipales, están debidamente preparados, con el firme propósito de brindar, a la comunidad, un servicio eficiente basados en su  DISCIPLINA, HONOR Y ABNEGACION.  Todos los miembros de la institución  tienen responsabilidades en el servicio.  
La organización del Cuerpo de Bomberos Municipales permite que funcione de manera eficiente, además ayuda al bombero a tener, como parte de ella, normas y reglamentos que especifican las responsabilidades de oficiales y otros bomberos. 
El  bombero debe familiarizarse completamente con estas normas y reglamentos y con cualquiera de las pautas escritas que existan o se instauren.


SU PAPEL EN LA COMUNIDAD

 

El papel del bombero va más allá del combate de incendios y otras tareas fácilmente identificadas. 
Tiene otros papeles en la comunidad. 
Como bombero, es visto con cierto respeto por otros ciudadanos. 
Este respeto no viene automáticamente, sino es algo que se gana una y otra vez. 
Cada bombero es un representante de relaciones públicas de su cuerpo de bomberos. 
Una actitud de respeto y cooperación hacia otros bomberos mejora la atención y eleva la imagen de la institución ante el público.

El público esperará que el bombero pueda contestar preguntas acerca de la prevención de incendios, extinción de los mismos, primeros auxilios y asuntos parecidos. 
El bombero debe tener las respuestas a tales preguntas como “¿Dónde debo colocar un detector de humo?” y  “¿Por qué ustedes rompen ventanas?”.

La imagen del bombero ha sido muy positiva a través del tiempo.  Esta buena imagen puede mantenerse y mejorarse si el bombero recuerda ser sincero y positivo en cuanto a sus compañeros y a su misión.  Deberá buscar el apoyo de los ciudadanos y ser activo en proyectos comunitarios.

A. TRABAJO EN EQUIPO


Al bombero se le llama para atender a diferentes tipos de emergencia. 
En la mayoría de éstas, es muy importante el tiempo de respuesta. 
El acto de salvar una vida o controlar un incendio depende del tiempo. 
El bombero no tendrá control sobre el retraso de alarmas, pero sí sobre una respuesta rápida y segura por estar preparado para el trabajo. 
Debido a que el ahorro de tiempo es esencial, los cuerpos de bomberos tienen ciertos procedimientos básicos planeados antes que ocurra una situación de emergencia, tales como métodos de entrada forzada, métodos de rescate y primeros auxilios, métodos de tendidos de mangueras, procedimientos para el uso de escaleras, y otros, que requieren trabajo en equipo.
La precisión de estas operaciones requiere cooperación, coordinación y que los bomberos trabajen juntos para cumplir una tarea de importancia para lograr el éxito de toda la operación. 
Trabajar juntos, bajo condiciones en las cuales la seguridad de uno depende de la acción de otros, requiere que se trabaje en equipo.
Todos los buenos equipos trabajan con confianza. 
La confianza es la fe en cada individuo y en el conjunto. 
Estudiar y practicar como un equipo desarrollará y nutrirá esta confianza. 
La fuerza del equipo está en las fuerzas combinadas de cada bombero que es miembro del mismo. 
El espíritu de equipo es el entusiasmo que se desarrolla a través de un trabajo satisfactorio y participativo.
La contribución de cada miembro al equipo es esencial para el funcionamiento apropiado. 
El trabajo en equipo se basa en los siguientes factores:
v  Todos los miembros deben tener un deseo común para el éxito.
v  Cada miembro debe contribuir con su trabajo.
v  Los miembros deben conocer muy bien sus funciones, su trabajo y las responsabilidades de los demás miembros del equipo para poder ayudarse uno al otro, como compañeros.
v  Los miembros deben tener  siempre comunicación entre sí.
v  Todos deben practicar repetidas veces para asegurar precisión y rapidez.

domingo, 13 de febrero de 2011

Bomberos Municipales de La Antigua en alerta ante explosiones del Volcán de Fuego

Los Bomberos Municipales de La Antigua Guatemala, se encuentran en alerta ante el incremento de las explosiones del volcán de Fuego, con un rango de 3 a 4 por hora, las cuales expulsan columnas de ceniza de hasta los 600 metros de altura sobre el cráter, confirmo la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred).
Según el boletín vulcanológico especial de la Conred, con base en la información del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh) la actividad del volcán podría incrementarse con el transcurrir de las horas.
 
Las explosiones están generando retumbos y sonidos de débiles a moderados que son perceptibles en poblaciones ubicadas al norte del volcán, entre ellas San Juan Alotenango, San Miguel Dueñas y Antigua Guatemala, Sacatepéquez.
Desde el pasado mes de enero se mantiene la alerta amarilla por parte de las autoridades de Chimaltenango, Escuintla y Sacatepéquez debido a la actividad que ha presentado el volcán de Fuego. Además a diario se reporta la comunicación con los voluntarios de las bases de radio ubicadas cerca del coloso, ante cualquier cambio o aumento de actividad.

miércoles, 9 de febrero de 2011

EQUIPO PROTECTOR PARA BOMBEROS MUNICIPALES DE LA ANTIGUA GUATEMALA

Se denomina equipo de protección personal o equipo protector, a todo aquel dispositivo o vestimenta, que debe usar toda persona que realice alguna actividad  en la que esté exponiendo  su integridad física y corra riesgo de sufrir algún daño o lesión.
El ambiente en que los bomberos municipales trabajan demanda que sean provistos con el mejor equipo protector personal disponible. 
Las lesiones pueden ser reducidas si los bomberos tienen ropa protectora y equipo respiratorio adecuados a su disposición y los utilicen cuando sean requeridos. 
La provisión y el uso de equipo protector de calidad no garantizará, por si mismos, la seguridad del bombero. 
Todo el equipo protector tiene su límite que debe ser reconocido para que los bomberos no sobrepasen el rango de protección del artículo.
El entrenamiento amplio en el uso y mantenimiento del equipo protector son necesarios para asegurar que proveerá una protección óptima.


PROTECCIÓN DE LAS EXTREMIDADES Y EL CUERPO
GUANTES:
En aquellas situaciones donde se involucre el manejo de materiales químicos, materiales calientes, líquidos, sangre, objetos con filo y punta, obliga a la utilización de guantes.  Existen varios tipos de guantes, según sea la necesidad:
Ø  Guantes de cuero para proteger de raspaduras.
Ø  Guantes de goma para manejo de ácidos.
Ø  Guantes de goma con cubierta de cuero para trabajos eléctricos.
Ø  Guantes de látex para evitar enfermedades infectocontagiosas. (Indispensables para asistir a una emergencia prehospitalaria)
Ø  Guantes de cuero con una capa de Nomex por dentro. Estos guantes son los especiales de bombero, ya que protegen contra el calor excesivo, la sangre y químicos.

BOTAS:
Los riesgos que ponen en peligro los pies los bomberos en la zona del siniestro son comunes.  Las lesiones contra las que deben tomarse precauciones son aquellas causadas por el calor, perforaciones e impactos. Las botas de bombero deben tener una protección metálica para los dedos (punta de acero), la planta del pie y suela antideslizante.

CASACA Y PANTALÓN:
El cuerpo también necesita protección en el trabajo de bomberos. Para la protección del cuerpo fueron diseñados el pantalón y la casaca, que también puede recibir el nombre de chaquetón.
Las casacas y pantalones pueden ser hechos de diferentes materiales como: asbesto, tela aluminizada, hule, plástico, lona y Nomex. 
Pueden ser de uno o más colores y diseños exteriores.  Mientras el diseño básico de la mayoría de estos es el mismo, es necesario tener cuidado de que las provisiones de la norma No. 1971 de la NFPA,  ropa protectora para el combate de incendios estructurales, se cumpla.
Esta norma indica que se requiere de tres capas de material para la casaca y el pantalón:
Ø  Forro exterior: Es resistente a la flama y puede ser o no impermeable.
Ø  Forro central: Previene o inhibe que el agua, los líquidos corrosivos, el vaho y los vapores calientes alcancen el cuerpo del bombero.
Ø  El forro grueso interior: El propósito de este forro es proporcionar una protección térmica y para acolchonar.  Es común que el forro central y el forro interior vengan pegados o cosidos en una sola piezas

Hay que tomar en cuenta el mantenimiento que se les debe dar a estos equipos ya que son demasiado caros. 
Esto significa que hay que lavarlos cuando se encuentren sucios y secarlos adecuadamente.  Mientras más cuidemos nuestro equipo, éste nos brindará una mayor protección y nos durará más tiempo.


ATACADO A TIROS EN LA ALDEA SANTA ANA

Ricardo Bocaletti García de 22 años fue acribillado a tiros ayer en la Calle del Agua, Aldea Santa Ana de la Antigua Guatemala, informaron los Bomberos Municipales de esta ciudad.
Los socorristas del casco rojo  fueron alertados y al llegar al lugar verificaron que ya no presentaba signos vitales por lo que procedieron a llamar a las fuerzas de seguridad.

Bocaletti, tenía dos balazos en el cráneo y el tórax, los cuales le causaron la muerte instantáneamente y según versiones de los vecinos y curiosos  desconocidos a bordo de una moto de color rojo lo esperaban y cuando llegó le dispararon sin mediar palabra alguna.
“Mi hijo regreso ayer de Estados Unidos de un viaje de trabajo y desconocemos que pudo haber pasado”, relato su progenitora Alma García.

martes, 8 de febrero de 2011

Bomberos Municipales de Antigua sofocan incendio forestal en San Lucas Sacatepéquez

Los Bomberos Municipales de La Antigua, sofocaron un incendio forestal en San Lucas Sacatepéquez. (Foto de Pedro Samayoa/RRPP-CBM-A)

Los Bomberos Municipales de La Antigua Guatemala, sofocaron un incendio forestal que amenazaba tres casas en las cercanías de Residenciales Vista Azul, kilómetro 32 ruta hacía Antigua Guatemala en San Lucas Sacatepéquez.
Las llamas amenazaban con llegar a las casas donde los socorristas lanzaron agua para sofocar el fuego, mientras hacían una brecha para cortar la trayectoria del fuego, dijo el oficial bomberil, Byron Orenos.
“Pensamos que el fuego iba a llegar a las casas. Todo empezó en el bosque donde había una fogata en un basurero y el viento provoco que las llamas de expandieran rápidamente”, relato María Pérez López, propietaria de una de las casas que eran amenazadas por el incendio forestal.
Los socorristas acomplan las mangueras que utilizaron para sofocar el incendio.

Tres casas eran amenazadas por el fuego en el Kilómetro 32 ruta de San Luacas a la Antigua Guatemala.

Los socorristas del caso rojo trabajaron aproximadamente 6 horas para controlar el incendio y evitara que este resurgiera de las cenizas de nuevo, indico Orenos.
En el año 2010 se sofocaron 12 incendios forestales en diferentes partes de Sacatepéquez con la colaboración de entidades afines.

domingo, 6 de febrero de 2011

Bomberos Municipales de La Antigua en prevención en Cortejo Procesional

Los Bomberos Municipales de La Antigua Guatemala, colocaron un Centro de Operaciones de Emergencia (COE) en su estación durante el paso de la procesión de rogativa  de la consagrada imagen de Jesús Nazareno de la Caída de la aldea San Bartolomé Becerra.
Los paramédicos enviaron dos ambulancias en calidad de prevención las cuales fueron ubicadas en lugares estratégicos por el arribo de centenares de personas que participaron en la  III Jornada de oración por la vida y la paz de Guatemala.
Personas de distintos lugares oraron por Guatemala en la jornada que inició por la mañana con una homilía, exposición del santísimo, oración y guardia a la imagen de Jesús Nazareno de la Caída.  
Luego 1 mil 680 devotos cargadores, llevaron en hombros el cortejo que recorrió el poblado de la ciudad colonial.
Las calles fueron adornadas con flores y alfombras para el paso de la procesión de plegaria, que recorrió las calles  junto a una banda musical que interpretó varias marchas alusivas al evento religioso.
Julio Castellanos, Historiador antigüeño, asegura que Jesús de la Caída es la única imagen colonial tiene una postura muy particular, representa la tercera caída   para los files católicos y de mucha devoción entre los Antigueños, pero es más de los capitalinos.

sábado, 5 de febrero de 2011

INICIAN LAS CLASES EN LA ACADEMÍA DE BOMBEROS MUNICIPALES DE ANTIGUA

Hoy fue la inauguración oficial de las clases de la V promoción de caballeros y damas aspirantes a Bomberos Municipales de La Antigua Guatemala con una metodología interactiva de enseñanza aprendizaje, lo que demanda que los estudiante pongan en práctica la preparación teórica,  en el servicio diario que se presta en la comunidad.
Los aspirantes a bomberos, reciben sus clases en la propia estación donde les imparten las catedras de primeros auxilios, según el manual elaborado por la Escuela Técnica de Bomberos Municipales de Guatemala y bajo la supervisión del Ministerio de Educación (MINEDUC).

Las técnicas de enseñanza son impartidas por el grupo de instructores profesionales al frente del comandante ejecutivo, Oficial Mayor Pedro Samayoa y la Oficial Mayor Stephanie Richman. 

También participan los instructores los Oficiales Amilcar Arana y Gerardo Espinoza, dos  paramédicos graduados y certificados en Estados Unidos. 

Además el Oficial Mayor Rony Véliz va a contribuir con su experiencia en apoyar a los instructores bomberiles, mientras las Damas Bomberos, Cristina Callejas y Lorena García, actuaran como auxiliares de los instructores de la Academía bomberil.
Esta Academia de Bomberos es la única a nivel nacional, que es avalada por el Ministerio de Educación (MINEDUC) de las  tres instituciones de servicio público que existen en Guatemala.

El curso para aspirante a bombero municipal sigue una metodología interactiva de enseñanza aprendizaje, en la cual existe una participación continua del aspirante, quien pone en practica las enseñanzas en la practica diaria del servicio a la comunidad. 


El contenido de los cursos para esta promoción son Historia bomberil, disciplina y organización, educación y seguridad, comunicaciones, preparación física, equipo de protección personal. 

Extinguidores, química del fuego, bombas contra incendio, mangueras, chorros contra incendio, espuma, entrada forzada, primeros auxilios, escaleras, materiales peligrosos y rescate y cabuyería. 

Los objetivos del curso de bomberos son: 

Describir la organización del Cuerpo de Bomberos Municipales.
Describir la historia de los cuerpos de Bomberos. 
Describir los diferentes tipos y la construcción de las mangueras 
Utilizar correctamente la guía norteamericana de respuesta en caso de emergencia 
Demostrar el tratamiento pre-hospitalario en la aplicación de primeros auxilios 

 
Las autoridades del Ministerio de Educación, supervisan el curso de bomberos cada 15 días hasta la graduación de los aspirantes que se tiene prevista para  el 3 de noviembre del presente año, fecha en la cual se cumplen  7 años de fundación del Cuerpo de Bomberos Municipales de La Antigua Guatemala.